
Dentro de dos dÃas está prevista la manifestación del Orgullo Gay en Jerusalén con un recorrido de sólo 500 metros en la que 7.500 agentes intentarán evitar protestas violentas por parte de ortodoxos judÃos.
El parque de la ciudad y todo el recorrido será acordonado hora antes de iniciar la marcha, pero se teme que los ortodoxos preparen emboscadas a los manifestantes mientras se dirigen al parque o se entremezclen entre ellos para fomentar disturbios. Los activistas pretenden convocar a la entrada de Jerusalén dos conocidos activistas ultraderechistas, para bloquear el acceso a la ciudad e “impedir que los maricones de Tel Aviv puedan contaminar Jerusalén�.