El sacerdote

El sacerdote
Patricia Nell Warren
Editorial Egales (libro cedido por Berkana)

Tom Meeker es un sacerdote católico de una pequeña ciudad de Montana cerca de Helena, a mediados de los setenta. Joven, tremendamente guapo, apasionado por su trabajo… hasta que aparece Vidal Stump, un hombre de su edad, pendenciero, con genes indios, aparentemente casado con una mujer algo rara, siempre metido en peleas, partidas de cartas y borracheras. Vidal viene a confesar algo al sacerdote, y entonces la vida de Tom se viene abajo, porque Vidal es también tremendamente guapo.

La apacible ciudad en la que nunca pasa nada se trasforma radicalmente, porque ahora Tom empieza a conocer, de la mano de Vidal, a esos dos rancheros que crían caballos y que hasta el momento sólo eran un par de hombres solteros que vivían juntos, o las dos señoras viudas que cosen las casullas para la liturgia, que habían decidido hacerse mutua compañía a la muerte de sus maridos y que probablemente compartan algo más que las sobremesas con pastitas.

Y los bailes de carnaval, a los que Tom puede asistir bajo una máscara, en los que descubre que hay hombres a los que les gusta vestirse de mujer, hombres que se sienten mujer y hombres que aman a otros hombres. Entonces empieza a leer The Advocate y descubre que hay un mundo paralelo y que su propia iglesia comienza a organizarse. Y aparece Doric, el compañero de seminario con el que compartió tantas y tantas cosas cuando eran jóvenes. Y Doric ahora es un cura católico y tiene novio.

Escrito en 1976 por Patricia Nell Warren, nacida en Montana en 1936, sus obras han sido traducidas a diez idiomas. Ya recomendamos en estas mismas páginas su ensayo “El vestuario de color rosa«, sobre la historia de los atletas LGTB, pero además es también la autora de absolutos best-sellers como “El corredor de fondo» y sus secuelas, publicados por Egales. Literatura de fácil lectura, muy entretenida y muy comprometida, impecable, para todos los públicos.

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Por otro lado, esta semana nos dejaba Paco Vidarte. Desde aquí recomiendo con toda las fuerzas que me quedan en este puto año (y sólo estamos en enero), que leáis sus obras. “Homografías» y “Extravíos» las podéis encontrar en su página personal enteritas. “Teoría queer» y “Etica marica» son absolutamente indispensables. “Etica marica» es como esos troncos de Brasil que uno compra cuando miden diez centímetros y acaban agujereando el techo del salón. El tiempo lo dirá. Ya lo está diciendo.

Además, su página web, sobre todo el capítulo de Linfomanías (Confesiones de una linfómana incurable) es todo un ejemplo de serenidad, buen humor, lucidez, decencia, dignidad y agradecimiento. Duro pero brillante, como él.

“Sólo una puta linfómana es capaz de escribir Ética Marica. Si no hubiera tenido ya el bicho dentro comiéndome, no habría escrito el libro en dos semanas, que tenía este mes de julio una ansiedad y unas prisas por acabar el manuscrito que parecía que iba a morirme… y vaya si el cuerpo es listo: escribe ya este puto libro póstumo Paca, que si no no te va a dar tiempo… “

elputojacktwist