El Partido Riojano (PR) es la tercera fuerza política de La Rioja. Su Presidente, Miguel González de Legarra, está metido en política desde los 16 años, los mismos que lleva ocupando un escaño en el Parlamento regional. En las elecciones autonómicas de este mes vuelve a encabezar la lista de su formación, un partido «riojanista por encima de todo» y que huye de encasillamientos ideológicos. Quizá por eso no le gustan los radicalismos ni las imposiciones, aunque cree que a veces –como en el caso del matrimonio homosexual- «es necesario dar un paso al frente«.
Nos recibe en la sede de su formación en el Casco Antiguo de Logroño para hablarnos de su partido, de sus propuestas electorales y de los referentes gays y lésbicos. Piensa que en circunstancias normales nadie debería publicitar su orientación sexual, pero reconoce respetar y admirar mucho a quienes dan ese paso, «porque todavía en esta sociedad sigue siendo un acto de valentía«. Legarra cree que para un político salir del armario supone correr algún riesgo y dice que en algunos partidos se puede «experimentar» con mayor tranquilidad que en otros. En el suyo, nos recuerda, dicen a menudo que los experimentos se hacen con gaseosa.
dosmanzanas.- Logroño ha sido recientemente la sede de los XIX Encuentros Estatales LGTB. A la apertura de los mismos no acudieron las autoridades locales ni la Defensora del Pueblo. ¿Qué opinión te merecen estas ausencias?
Miguel González de Legarra.- Me pareció realmente lamentable, de muy mala educación. Además, tratándose de una reunión del colectivo de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales, con la importancia que sin duda tiene para una ciudad como Logroño, yo creo que era digna de ser tenida en cuenta por las autoridades y de apoyarla con la presencia de todos nosotros.
dm.- El Presidente de La Rioja, Pedro Sanz, respondió con un ‘que les den por ahí’ a quienes le acusaban de haber grabado a Zapatero en la Conferencia de Presidentes. ¿Conseguiremos erradicar algún día las expresiones e insultos homófobos?
M.G.- Me temo que no. Yo pienso que habrá que intentar poco a poco ir quitándoles hierro y no considerarlas como unas expresiones homófobas sino como una costumbre que difícilmente se va a erradicar del lenguaje porque es una forma de hablar que lamentablemente utilizamos prácticamente todo el mundo. Además, yo creo que no hay palabras mal dichas sino mal interpretadas, y que determinadas expresiones que depende de cómo se digan sí pueden ser ofensivas, en otro contexto y dichas de otra forma pueden ser simplemente expresiones coloquiales o frases hechas que todo el mundo utiliza.
dm.- El Partido Popular rechazó hace unos meses en el Parlamento de La Rioja vuestra propuesta de crear ‘Tutorías de Orientación Sexual’ en los centros de educación secundaria. ¿Al PP los adolescentes homosexuales le importan ‘un pimiento’?
M.G.- Eso lo tendría que contestar el PP. [Risas] Yo no creo tampoco que le importen ‘un pimiento’; lo que hace el Partido Popular es calibrar qué le puede dar más o menos votos, y en función de eso apoya más o menos una opción determinada. De todas formas, no creo que sea una demostración de desentenderse de un colectivo como el de los homosexuales adolescentes. Vamos, espero que no lo sea.
dm.- ¿Será la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía una herramienta útil para avanzar en el camino de la igualdad social?
M.G.- Yo desde luego confío en que sí. Tenemos que empeñarnos en conseguir que se erradiquen todas las desigualdades en esta sociedad y esa asignatura debiera nacer con este objetivo.
dm.- ¿Crees que el gobierno ha suavizado los contenidos de esta asignatura relacionados con la diversidad afectivo-sexual?
M.G.- La verdad es que no lo conozco en profundidad, pero cuando desde un gobierno se hace un planteamiento rupturista como es el de la implantación de esta asignatura, si quieres que eso realmente funcione, tienes que establecer un ‘toma y daca’ con los que piensan que eso no es efectivo, y tienes que ceder a otras formas de pensamiento e intentar hacer un planteamiento equidistante. Una vez que se implante la asignatura, y que sea asumida por la sociedad y fundamentalmente por los docentes, poco a poco con el tiempo podrá ir evolucionando hacia lo que inicialmente se había planteado. Yo no creo tampoco que sea bueno imponer una decisión como ésta sino que hay que ser flexible para poder llegar aunque sea a largo plazo al objetivo que nos habíamos marcado.
dm.- Para ser equidistantes y no imponer, en cuestiones como el matrimonio, ¿habría que haber optado por el término unión civil u ‘homomonio’?
M.G.- No, hay momentos en los que es necesario dar un paso al frente. Sin embargo, quizá en otro momento esto hubiera sido impensable y si se hubiera intentado imponer hubiéramos provocado una ruptura y un enfrentamiento mucho mayor, que hubiera conseguido que cuando diese la vuelta la tortilla, los avances se hubieran convertido en retrocesos. Yo creo que cada asunto tiene su momento y lo difícil muchas veces es encontrarlo.
dm.- En La Rioja no tenemos conocimiento de que haya sido denunciada ninguna agresión homófoba. ¿Es esta región el paraíso para gays y lesbianas?
M.G.- En absoluto. Posiblemente agresiones físicas no se producen, ni contra gays y lesbianas ni contra otros colectivos, porque somos una comunidad relativamente pacífica, no somos excesivamente broncas; pero agresiones de otro tipo hay todos los días, en puestos de trabajo, en la escuela, en las cuadrillas de amigos, en la calle… Una forma de mirar, un insulto al pasar, eso existe en todos los sitios y La Rioja no es una excepción. Además, yo creo que en las pequeñas poblaciones muchas veces es donde más agresiones verbales se producen, y sobretodo el peso de la indiferencia. Una mirada despectiva puede ser más agresiva y más dolorosa que una bofetada.
dm.- ¿Qué propuestas en materia lgtb habéis incluido en vuestro programa electoral?
M.G.- Hemos procurado que no haya un apartado específico para estas propuestas sino que estén incluidas de forma transversal. En el ámbito del bienestar social, por ejemplo, proponemos que en las residencias de ancianos se respete y se facilite la convivencia de parejas del mismo sexo. En materia educativa, hemos incluido la propuesta de las Tutorías de Orientación Sexual en los centros de secundaria, y en el apartado de salud la financiación pública de las operaciones de reasignación de sexo para personas transexuales.
dm.- En una escala de cero a diez, representando el cero la extrema derecha y el diez la extrema izquierda, ¿dónde se sitúa el Partido Riojano?
M.G.- Obligatoriamente en el cinco porque somos un partido que aunque a nivel individual tenemos nuestras propias creencias, como colectivo procuramos ser un partido absolutamente abierto, riojano, sin más etiquetas, para que todos los ciudadanos de esta comunidad autónoma puedan encontrar acomodo en este partido. Para eso lógicamente hay que hacer un trabajo de equilibrio entre distintas sensibilidades ideológicas y de momento lo vamos consiguiendo, tenemos la suerte de contar con ex militantes del Partido Popular y de Izquierda Unida que conviven perfectamente porque nos ceñimos a unos objetivos territoriales sin encorsetamientos ideológicos.
dm.- Y Miguel González de Legarra, ¿dónde se encuentra en esa escala de cero a diez?
M.G.- En el cinco lógicamente. [Risas] De verdad, es que procuramos huir de ese posicionamiento ideológico. Nosotros somos riojanistas por encima de todo, incluso de las ideologías, y eso es precisamente lo que da sentido al Partido Riojano. De todas formas, si en ámbito personal yo tendría que adoptar alguna posición ideológica, desde los 15 o 16 años que participo en la actividad política, en más de una ocasión me he definido como socialdemócrata.
dm.- ¿Es la izquierda por naturaleza más sensible a las reivindicaciones de homosexuales y transexuales?
M.G.- Bueno, ha habido grandes historias de represión por parte de grupos de izquierda hacia homosexuales y transexuales. Podemos recordar como los regímenes comunistas de la Europa de este persiguieron a gays y lesbianas, incluso internándolos en campos de concentración u hospitales especiales. Hay personas en la izquierda que siguen sin tragar a los homosexuales y que lo hacen públicamente. De todas formas, como concepto y de forma general, sí que evidentemente la izquierda es más sensible a esas demandas porque en principio parece que es más abierta al bienestar de las personas.
dm.- Los militantes del Partido Riojano pertenecen a un amplio espectro social e ideológico. ¿Ha sido complicado convencerles de la necesidad de apoyar la igualdad de gays y lesbianas, incluyendo el matrimonio y la adopción?
M.G.- En absoluto. Ha sido una cuestión que desde el primer momento que se planteó en el seno del partido todo el mundo entendió por unanimidad que no había discusión posible y que el Partido Riojano tenía que tomar posición ante esta cuestión.
dm.- ¿Ningún concejal del Partido Riojano tendría “problemas de conciencia» a la hora de casar a una pareja del mismo sexo?
M.G.- Pues no lo sé. [Ríe] Personalmente cada uno tendría que decirlo, pero yo pienso que no, conozco a todos lo concejales y alcaldes del Partido Riojano y me atrevería a decir que no hay ninguno que pudiera tener problemas de conciencia.
dm.- Cada día hay más políticos, jueces o periodistas que salen del armario y visibilizan de una forma positiva nuestra realidad. Sin embargo, ¿no crees que faltan referentes gays y lésbicos a nivel local y regional?
M.G.- Yo creo que no. Hombre, es la eterna discusión: ¿por qué una persona tiene que estar obligada a publicitar su orientación sexual? En circunstancias normales no debería de ser así y eso es precisamente lo que hay que conseguir, que no nos fijemos en eso sino en la calidad de la persona. Hay excelentes políticos homosexuales y también magníficos sinvergüenzas homosexuales, pero que sean honestos o sinvergüenzas no lo determina su orientación sexual sino su personalidad.
dm.- Pero los referentes hoy en día siguen siendo necesarios. El juez Grande-Marlaska dijo cuando salió del armario que lo hacía para ayudar a jóvenes que lo podían estar pasando mal.
M.G.- Sí, y es importante también. Yo desde luego respeto y admiro mucho a quienes dan ese paso porque todavía en esta sociedad sigue siendo un acto de valentía.
dm.- ¿Está La Rioja preparada para que un político salga del armario públicamente?
M.G.- [Risas] Pues no lo sé. Depende del político, del momento y del partido del que sea ese político, porque hay partidos que pueden permitirse determinados “lujos» y correr determinados riesgos y otros que no se lo pueden permitir. Un partido como Izquierda Unida, por ejemplo, que tiene un compromiso muy claro y un apoyo determinado, puede correr riesgos determinados a la hora de salir un político del armario o de apoyar el cierre de una central nuclear. Me refiero a que en unos sitios se puede experimentar de una forma más tranquila que en otros.
dm.- ¿En el Partido Riojano no se puede experimentar?
M.G.- En el Partido Riojano somos de los que solemos decir bastante a menudo que los experimentos con gaseosa porque somos muy vulnerables y sabemos que un paso en falso –del partido en general- puede ser nuestro fin.
dm.- Cuando hablas de los riesgos de que un político salga del armario, ¿es porque perdería votos o apoyos?
M.G.- O porque podría ser utilizado en su contra por otros adversarios políticos. En cualquier caso, a mí me parece que son decisiones personales de los políticos y que no pueden adoptarse en función de si beneficia o perjudica al partido.
dm.- Si dos manzanas son una cosa, dos peras otra totalmente diferente, y una manzana y una pera, o una pera y una manzana nunca son iguales que dos manzanas o que dos peras… ¿que le dirías a la autora de esta reflexión?
Ana Botella. No le podría decir más que eso; y ya es mucho. Decirle a alguien eres una Ana Botella es decirle mucho. Me parece que es una frase digna de una mujer reaccionaria y que vive en la derecha más cavernícola de este país como es Ana Botella y su señor esposo.