Google y Apple, dos compañÃas multinacionales de gran importancia en el mundo de las telecomunicaciones, se han comprometido de forma explÃcita con los derechos de gays y lesbianas en los Estados Unidos al realizar sendas donaciones a la campaña en contra de la Proposition 8, la iniciativa que pretende prohibir el matrimonio entre personas del mismo sexo en California que se votará el próximo 4 de Noviembre.
Los fundadores de Google, cuya sede se localiza precisamente en California, han donado 140.000 dólares a la campaña. Según explicó Sergey Brin, que ha donado 100.000 dólares, «respetamos las creencias de ambos lados, pero bajo nuestro punto de vista se trata de una cuestión de igualdad. No deberÃamos restringir el derecho fundamental de nadie a casarse con la persona que ama, independientemente de cual sea su sexualidad». Su socio Larry Page, algo más austero, ha contribuÃdo con 40.000 dólares.
Por su parte, Apple, cuyo cuartel general también se localiza en California, ha donado 100.000 dólares a la campaña, esgrimiendo argumentos similares para oponerse a la Proposition 8. En un comunicado oficial, Apple recuerda que en su momento ya fue una de las primeras empresas californianas en ofrecer los mismos beneficios sociales a las parejas de sus trabajadores homosexuales que a las de sus compañeros heterosexuales, y manifiesta de forma explÃcita que «más que una cuestión polÃtica, ésta es una cuestión de derechos civiles».
Las iniciativas de Google y Apple han causado cierta sorpresa en medios estadounidenses, pese a tratarse de dos compañÃas con un historial que ciertamente puede calificarse de «gay friendly». Y es que no es habitual que compañÃas multinacionales manifiesten una opinión tan rotunda en un tema tan controvertido en muchos de los paÃses en los que tienen intereses.