La Confederación Católica Nacional de Padres de Familia (CONCAPA) ha lanzado este miércoles una propuesta realmente singular, pidiendo a los profesores de Educación para la CiudadanÃa que rechacen dar sus clases con los libros de texto de la materia y que lo hagan con un ejemplar de la Constitución Española de 1978.
Además, CONCAPA les pide que renuncien a los criterios de evaluación establecidos por el Ministerio y que únicamente evalúen trabajos sobre los artÃculos de la Carta Magna, con lo que evitarÃan «conflictos con las familias«, apuntando con cierto tinte de amenaza velada que de no hacerlo podrÃan «exigirles responsabilidades» por convertirse «en el instrumento gubernamental de ideologización y de proselitismo socialista«.
«A diferencia de otros paÃses democráticos de nuestro entorno, en España se ha optado por contenidos morales, en una clara intromisión en los derechos fundamentales de la familia, única con capacidad para decidir cómo ha de ser la formación moral y ética de sus hijos«, añade el comunicado de esta asociación católica.
Resulta curioso que CONCAPA hable de contenidos morales y libros de texto, cuando hace apenas unos dÃas su presidente, Luis Carbonel, estuvo en México para presidir una rueda de prensa de un colectivo pro familia tradicional cuya nota de prensa pedÃa que los libros de texto de BiologÃa incluyeran que la homosexualidad es «una antinatural conducta desviada«.