La familia real sueca forma parte de las iras de la última campaña de la secta homófoba del pastor Fred Phelps, titulada ‘God hates Sweden‘ (Dios odia a Suecia), en la que se asegura que el rey Carlos Gustavo es homosexual y que el paÃs escandinavo es una «tierra de sodomÃa». La campaña se une a las anteriores ‘Dios odia a los maricones’, ‘Dios odia a EEUU’ y ‘Dios odia a Canadá’.
Uno de los motivos del enfado de los seguidores de Phelps es la ley que castiga la homofobia en Suecia. La muerte de cientos de turistas suecos en el tsunami del Sudeste asiático serÃa, por lo tanto, un «castigo divino» ante la deriva de los valores en Suecia. Hace unos meses ya hablamos en dm del odio homófobo de los seguidores de Phelps.